martes, 22 de noviembre de 2016

LA VUELTA AL TRABAJO (PRETEMPORADA)



Tras casi un mes de recuperación tanto física como psicológica, volvemos al trabajo para preparar la siguiente temporada de retos...

Ahora es tiempo de realizar una tonificación general que prepare nuestro cuerpo para los esfuerzos y establezca la base donde asentar los cimientos de la preparación necesaria para el siguiente reto. Es tiempo de crear base aeróbica, de gimnasio, de mucho gimnasio, es tiempo de horas entre pesas y esterillas, de abdominales y lumbares, tratando de fortalecer nuestros puntos débiles evitando una lesión que pueda ser el lastre de la temporada o incluso que la parta por la mitad. También es tiempo de buscar motivación, de saber qué es realmente lo que nos hace feliz.






En esta fase de la temporada se establecen los objetivos primarios y secundarios para seguir una evolución lógica que nos permita progresar, también un reparto de las cargas adecuado tanto de volumen como de intensidad.

En la preparación del objetivo principal, yo divido la preparación en tres fases:

FASE DE ACUMULACIÓN:  Su duración ronda las 10-12 semanas donde doy más importancia al volumen que a la intensidad de los entrenamientos ya que se trata de crear la base aeróbica para la consecución del objetivo principal. Entrenamientos cuya fatiga generada sea asimilable de un día a otro:

- Resistencia específica (correr y caminar) e inespecífica (otros deportes aeróbicos). En la resistencia inespecífica cobra gran importancia el entrenamiento cruzado.

- Fuerza de base del tren inferior, trabajo muscular mediante pesas, gomas, etc.

- Fuerza compensatoria del tren superior.

- Trabajo técnico (técnica de carrera, técnica de subidas, bajadas, etc)


La bicicleta siempre es buena opción para entreno cruzado.



FASE DE AJUSTE: La duración de la fase de ajuste suele estar entre 5-6 semanas. Se trata de una fase intermedia entre volumen e intensidad:

- Resistencia específica e inespecífica.

- Fuerza - resistencia del tren inferior y trabajo compensatorio del tren superior.

- Incremento de la intensidad, realizando trabajos intensos de duración inferior a lo previsto en competición.

- Trabajo técnico buscando el máximo nivel de eficiencia.


El remo es otra buena opción de entreno cruzado.



FASE DE DESCARGA O PRECOMPETICIÓN: Su duración no debería exceder (en mi opinión) las 3 - 4 semanas.

- Resistencia específica y ritmos de competición.

- Trabajo táctico (estudiar perfil, estrategias, que llevar y que no llevar...)

- Intensidad parecida a la competición con recuperaciones incompletas de media intensidad y poca duración.

- Fatiga entre entrenamientos de inferior a la fase de ajuste, a medida que nos acerquemos a la competición se minimiza hasta llegar completamente recuperados.

- Recordatorio del trabajo técnico.


Quiero recordar que esto es una orientación de cómo preparo a nivel personal mis objetivos personales, los cuales los suelo establecer en macrociclos y microciclos de forma que me permiten dividir y ordenar el trabajo a realizar. No estoy en posesión de la verdad absoluta.

jueves, 13 de octubre de 2016

CANAL DE CASTILLA ULTRA RACE 80 K...

...O LA LUCHA CONTRA LAS PIEDRAS DEL CAMINO


De repente aquí estoy, rodeado de sensaciones y pensamientos que me mandan parar: pinchazos en la parte alta de los femorales, dolores a ambos lados de la cadera, roces en la entrepierna, las uñas de los pies rotas, los km pasan muy lentos, apenas tengo agua, no llega el siguiente avituallamiento... pero lo peor de todo es que la carrera no está saliendo como esperaba, he tenido que pararme y he perdido a los miembros de mi equipo. Llevamos apenas 28 km.




Si algo he aprendido estos últimos años es que todo cambia en un instante, para bien o para mal...



Son las 9:00 y partimos de la Dársena del Canal de Castilla desde Palencia hacia Frómista con la intención personal de hacer una buena carrera y de pasar un buen rato con mis compañeros.






Al principio la gente sale a ritmos altos, y nosotros decidimos no cometer errores. Saldremos a rodar al ritmo establecido en los entrenamientos e incluso un punto por debajo con la intención de llegar vivos al tercio final de carrera.
La carrera ha comenzado fresca pero sabemos que llegará el calor irremediablemente. Durante la primera hora de carrera hemos recorrido poco más de 10 km para llegar a El Serrón, hemos parado en el primer avituallamiento donde nos ofrecen agua, no es mal parcial y, según nos cuentan, estamos en el top 20. Este primer tramo es divertido, el camino está en buenas condiciones y la temperatura es agradable.





El siguiente punto será el avituallamiento del km 19, allí podremos comer prácticamente cualquier cosa, y rellenar los botellines, pues el calor se empieza a notar.
Hasta entonces, los km transcurren de forma rápida, sin molestias, con la sensación de estar muy fuerte, por lo que decido encabezar la marcha del grupo a ritmo suave y constante. Durante estos 9 km las sensaciones siguen siendo inmejorables, recorriendo el Canal de Castilla entre chopos y risas del equipo Tordesillas Ultra Trail. La siguiente parada será Becerril de Campos.

Llegando a El Serrón, foto gentileza de ASDOPA.


Poco a poco vamos acercándonos a Becerril, allí la carrera da un pequeño rodeo para admirar las iglesias de San Martín, de Santa María y por último de San Pedro (donde además de acercarnos a la astronomía, ofrecen habitualmente conciertos de música clásica), donde realizamos el control de tiempo y paramos a comer. Aquí cometeré el error más garrafal que pude cometer, tan malo es no comer como hacerlo en exceso.




Nada más llegar, encontramos de todo y lo primero que hago es rellenar los botellines para hacer frente al siguiente tramo de 15 km. Después me dispongo a comer como si lo fueran a prohibir, por lo que salgo de allí bien, pero con el paso de los km la pesadez en el estómago se vuelve importante, lo que va a requerir a mi organismo que parte del esfuerzo que dedica a correr lo destine a digerir todo lo que me he metido dentro.



Poco a poco salimos hacia la Venta y, mientras los cuatro integrantes del equipo seguimos juntos, (Alberto Blanco Rojo, José Antonio Diez Garcia, José Antonio Abril Cano y un servidor), el otro miembro, Manuel Abril, está tratando de alcanzar podio.

Ya en el km 20 vemos que las piedras del camino empiezan a aparecer y al cabo de un rato van pasando factura en nuestros pies, y a mí personalmente, en mi cabeza. El camino tiene tanta piedra que no sabemos donde poner los pies, y pisar una piedra mal te puede, literalmente, sacar de carrera, con un tobillo o una rodilla hechos polvo.





Poco a poco el calor aprieta y las piedras y el estómago me van haciendo mella. No consigo digerir nada y la deshidratación comienza a aparecer. Mi cabeza va debilitándose y a mi voluntad, otras veces inquebrantable, le salen grietas.

Yo voy resistiendo poco a poco y cada vez veo que me cuesta más seguir la estela de mis tres compañeros, por lo que decido dejarlos ir en el km 28. Los veo muy bien, y pueden clasificar arriba, no debo ser un obstáculo ni una carga. Yo me encuentro realmente mal, empiezo a pensar en todas y cada una de las cosas negativas que me pasan por la mente, estoy ante un muro que tendré, ya no que saltar, sino que escalar con todas mis armas.

Todo pasa muy rápido, de repente me duele en un costado, el pulso lo noto disparado y la mente bloqueada. Por suerte mi cabeza funciona, es el momento de ser creativo por lo que saco el MP3 y me pongo música, intento correr lento pero sin querer me acelero, quizá con la esperanza de encontrar a mis compañeros en el avituallamiento del km 34, del que sólo restan 6 km.

En este momento Irene me escribe y me anima, también pienso en mi compañero Eduardo Flecha y Pablo Real que gustosamente se cambiarían por mí. Qué decir de un señor que lleva 6 operaciones y sigue con su ánimo inquebrantable, soportando los avatares de un cáncer, con los puños en alto y la mirada fija de la determinación. Grande Pablo!

Poco a poco voy recorriendo camino pero me tengo que parar a respirar porque subo demasiado el ritmo y me estoy vaciando. Decido tomar un gel e ir poco a poco trotando pero a los 500 metros debo caminar otra vez, poco a poco me digo, esto es tan sólo un bache...

Poco más que arrastrándome llego al avituallamiento que no me paso de casualidad, saliéndome del camino establecido, allí me esperan mis compañeros y a la postre, el que señor que va a tirar prácticamente de mí durante casi 50km, voy realmente mal ... y no me entra la comida...


Jose Antonio, héroe y artífice de la meta.

En el avituallamiento de La Venta me encuentro con Alberto Blanco, José Antonio Abril y José Antonio Diez.

Me preguntan que tal voy, les digo que muy vacío, lleno los botellines y bebo un vaso de coca cola, apenas pruebo bocado y seguimos caminando este primer km para coger un poco de aire.
Lo próximo son 18 km sin avituallamiento alguno y no será hasta el km 52, en Boadilla del Campo, donde nos den comida y agua. Emprendemos la marcha de nuevo y a los pocos km veo que tanto Alberto como José Antonio Abril se quedan unos metros por detrás, es entonces cuando José Antonio Diez tira de mí sospechando que a los compañeros no les queda mucha carrera, no vaya a ser que abandone yo también.

Poco a poco los km van pasando y aunque poco, veo que ando algo mejor, sin embargo debo parar en varias ocasiones porque voy con el pulso disparado. Estoy ante una rampa y no se que hacer, así que ante la duda me tomo un gel y una pastilla de sal, bebo algo de agua y compruebo que me queda muy poca. Habrá que administrarse, como bien dice mi amigo José Antonio.

La verdad es que llevamos algo más de 40 km y llegar hasta aquí me ha costado lo suyo (creo que nunca me costó tanto recorrer 40 km) por lo que trato de pensar en llegar al siguiente avituallamiento (que marca el km 50 pero que será en el km 52), allí decidiré si me retiro o no... pero claro, tampoco quiero dejar a mi compañero solo... intentaré seguir pero... no está claro del todo, me noto completamente vacío.




En un ultra se muere y se resucita varias veces, y cuando esto pasa, te sientes poderoso, muy poderoso.

El caso es que cuando peor me sentía, pensaba que se pasaría pero no se pasaba, y entonces la sensaciones negativas invadían mi mente haciendo que se iniciase un bucle que iba de la cabeza a las piernas y viceversa difícil de controlar; trato de pensar en otra cosa pero los km pasan muy despacio.

Entre dudas llegamos al avituallamiento del km 52 donde nos dan agua y nos disponemos a llamar a los compañeros que van por detrás, tras varios minutos, Alberto me confirma que ambos han abandonado por lesión. Me da una rabia terrible, el equipo estaba haciendo un papelón.

Entre tanto, nos encontramos a gente por el camino que adelantamos, que va bastante cansada y eso me da fuerzas para seguir. Continuamos, por mi parte con las ganas de beberme todo el agua del Canal de Castilla, deshidratado como voy, pero con algo más de ánimo.

Cuando no restan más que un par de km nos encontramos con un par de compañeros de Osorno, uno parece que tiene un pequeño incidente que entre todos solucionamos, entramos juntos en Boadilla del Campo y compartimos risas y comida. 
Yo me dedico a beber como si lo fueran a prohibir, rellenar botellas y comer membrillo y plátano, alimentos que se asimilen rápido, que nos permita llegar bien al penúltimo avituallamiento situado en Requena.

Ellos, más frescos, hacen una parada rápida, nosotros tardamos algo más. Me duelen hasta las pestañas.

Poco a poco continuamos con la misma tónica, me voy encontrando mejor, y aunque no tengo problemas musculares, el cuerpo no va como a mí me gustaría. Aún así, estamos haciendo un carrerón, sobre todo mi compañero.

Van pasando los km y me doy cuenta de que sin querer casi darnos cuenta, nos hallamos en el km 67, restan 13 - 14 km para llegar y me veo por primera vez capaz de llegar a meta. Me invade una sensación de calma y felicidad. En 3 km vuelve a haber avituallamiento y esta vez será el útimo.

Llegamos no sin poco esfuerzo, paramos a tomar un café y tras un par de minutos de parada (creo que fue la más rápida de carrera) partimos en dirección a Frómista. En 10 km estaremos en meta.

La primera parte se hace fácil, el ritmo se sube sin querer debido a que el camino va cuesta abajo.
Aún con todo vamos muy justos y aminoramos el ritmo, ciertos calambres amenazan, pero los km ahora pasan algo más rápidos y son más disfrutones, supongo que había desaparecido la carga psicológica del abandono o de hacer una buena carrera no se...

De repente mi compañero recibe una llamada telefónica del resto del equipo que nos espera en meta (Cesar Mayo, Miguel Angel Oliveira), nos comunican que el compañero que iba delante ha hecho podium, que alegría más grande!!!

Manuel, de verde, en el 3er cajón.


Durante los últimos 5km mi compañero y yo vamos hablando de todo un poco, del equipo y lo bien que nos llevamos, de la Media Maratón de Tordesillas, etc  Mientras hablamos vamos adelantando a un par de corredores, los cuales nos seguirán de cerca.

Llegando ya a Frómista, nos confundimos de camino, apenas 100m pero cuesta arriba, no estamos para desperdiciar fuerzas precisamente...

Entre aplausos de la gente que ese día se encuentra en Frómista, entramos los cuatro corredores juntos, Miguel Ángel Oliveira nos espera para entregarnos la bandera de Tordesillas, con la que entramos a meta tras 9h 34 minutos, entre sentimientos de orgullo y una inmensa felicidad, ocupando las posiciones del 17 al 20.

QUE OS DEN PIEDRAS DEL CAMINO!!!!





Tras recuperar el aliento, Manuel nos enseña orgulloso su trofeo. El equipo ha colocado tres corredores en el top 20 y ha conseguido un podio. Ya lo dije desde el principio, hay equipo para soñar, este grupo no tiene límites...












viernes, 30 de septiembre de 2016

SEMANA ANTES DE UN ULTRA ...¿QUE HAGO?


Llega la última semana, antes de una carrera importante y ...¿qué hago? porque creo que no he entrenado lo suficiente... no se si llego en el mejor estado de forma... quizá debería haber hecho...

Es la ultima semana antes del objetivo anual que nos hemos marcado o quizá de algo que has marcado en rojo en el calendario, algo que queremos hacer muy requetebién pero tenemos dudas. Dudas acerca de nuestra preparación, de si hemos hecho todo lo correcto y quizá sobre si seremos capaces de soportar los malos momentos que vendrán.



1. Descanso activo. Durante esta semana haremos 2 o 3 rodajes de hasta 1 hora a ritmo suave, al ritmo que llevaremos en carrera. Se trata de ir bajo de pulso, estar activo pero descansado, de no machacar articulaciones ni grupos musculares. Pasear, leer, y elaborar una estrategia son tus mejores entrenamientos esta semana.

La última semana no vas a entrenar todo lo que no has hecho en, al menos, los 6 meses anteriores a esa carrera, ni vas a recuperar los entrenamientos perdidos.
Esta última semana es para entrenar suave, para regenerar el cuerpo y que se recupere del esfuerzo de estas semanas atrás, no es para hacer series a 3´30" el km.

2. Descanso, descanso, descanso. Tratar de estar relajado/a y confíar en el trabajo que hiciste. Dormir las horas necesarias (de 8 a 9 horas) intentando madrugar y trasnochar lo menos posible, llevando una semana lo mas relajada y tranquila posible te harán llegar con las pilas cargadas a la línea de salida.




3. Cuida la alimentación pero no te obsesiones. No vas a adelgazar esta semana esos dos kilos que querias perder porque esta semana se trata de acumular nutrientes no de perderlos. Si has entrenado duro para esa carrera tan larga, seguramente tu bascula te está indicando que a lo mejor es agua y no grasa como crees lo que tienes en el cuerpo.

No trates de probar alimentos nuevos en tu dieta, esta no es la semana. Come equilibrado, con un aporte de hidratos (intenta que prevalezcan más que de costumbre, sobre todo los tres últimos días), proteínas y minerales dejando a un lado comidas no tan saludables que puedes comer los días después de la carrera mientras festejas la gran carrera que hiciste.

Cuidado con los alimentos ricos en fibra, su abuso no puede jugar una  mala pasada.

4. Prepara una estrategia. Es verdad que esta es muy distinta si vas a salir a ganar o con un objetivo de tiempo que a terminarla simplemente.

Aún así, mi recomendación es la siguiente: traza un perfil de la carrera con los avituallamientos líquidos y sólidos, de forma que siempre sepas la distancia que te queda hasta el siguiente avituallamiento, si hay una zona sin asistencia de muchos km, donde se encuentra la bolsa de vida de mitad de carrera donde hemos guardado cierto material o alimento...


Otra opción es imprimirlo...

Luego se forra con celofán y con una goma y un imperdible lo podemos llevar con nosotros toda la carrera.




5. Prepara todo con tiempo. Una vez que tenemos el entrenamiento hecho, que sabemos el material obligatorio que la organización nos exige y la estrategia, sólo nos queda una cosa: apuntar en una lista lo que nos llevaríamos (que seguro que al final hay cosas que no portaremos) pero yo siempre recomiendo elaborar una lista.
Esta lista dependerá del perfil de la carrera, de la meteorología, de la hora de comienzo y final previsto... Viene bien porque luego es lo típico que a última hora dices "me olvidé la cinta de pulso, o me olvidé el portadorsal..." 




fuente: trail a fuego




Yo suelo tener un papel y un bolígrafo siempre a mano para apuntar todo lo que me quiero llevar y así no olvidar nada.

Por último, meter las ganas de disfrutar, sin ellas el resto pierde el sentido absoluto de su existencia, somos conquistadores de lo inútil...

viernes, 23 de septiembre de 2016

UNBOXING II CANAL DE CASTILLA ULTRA RACE... ¿QUÉ LLEVAR?




Aunque no es una carrera de montaña, dada la fecha en que se celebra y la duración de la prueba, la organización nos obliga a portar un material obligatorio.
He de decir que, aunque el medio no es tan hostil como puede ser la montaña, si la cosa se pone fea podemos meternos en un buen lío, dada la distancia de un avituallamiento a otro, si bien las posibilidades son escasas y el recorrido es muy accesible para los vehículos a motor llegado un caso extremo.
 Para esta segunda edición, al igual que en 2015, (con buen criterio en mi opinión) la organización exige al corredor contar como MATERIAL OBLIGATORIO con lo siguiente:


- Manta térmica de 2 x 1,4 m
- Chubasquero.
- Reserva alimentaria de 500 kcal.
- 1 litro de agua
- Vaso plegable (proporcionado por la organización)
- Luz frontal.



He de decir que no es una organización puntillosa con el material en cuanto a este mínimo equipamiento, la verdad es que piden poca cosa porque creo que se necesita poco para andar seguro por la meseta palentina. aunque personalmente acudiré con alguna cosa cosa más, por lo que el MATERIAL ACONSEJADO (sobre todo si es tu primer ultra o tienes dudas sobre que llevar) sería el siguiente:






- Cortavientos de goretex, personalmente me parece mejor opción que un chubasquero, más transpirable sobre todo, teniendo en cuenta que en octubre por la tarde-noche ya refresca y que el año pasado nos dieron las 12 de la noche en meta. Importante el tema de la capucha.




- Reserva alimentaria. Esto va mucho en gustos, yo suelo llevar geles y sales, pero también me gusta llevar algo de comida más natural, como pueden ser los frutos secos o algún plátano.

- 1 litro de agua, que prefiero llevar en dos botellines delanteros por el tema de ver continuamente el agua que me queda, a diferencia por ejemplo, de los camelback.

- Luz frontal y además mi consejo es el de llevar pilas de reserva, nunca sabes cuando las pilas van a dejar de funcionar.



- Luz trasera. Existen un montón de modelos por apenas 5 euros con varias opciones de uso como luz roja fija o intermitente, luz blanca... sirve para que te vean por detrás y en caso necesario... para cambiar las pilas de tu frontal.


-Mochila para portar lo anterior. Creo que lo añadido, a mayores de lo que pide la organización, ocupa poco y en una mochila de 5 litros como la mía entra perfectamente. Yo suelo utilizar la Salomon S-lab Advanced Skin 5 set aunque existen modelos mas económicos.




Manguitos y pantorrilleras, son piezas que ocupan poco y pueden abrigarnos en caso necesario. Las pantorrilleras hay quien las prefiere compresivas, puede ser buena idea llevarlas puestas desde el inicio aunque pueden dar excesivo calor.

- Buff o tubular. Tanto si hace frío como si hace calor, es imprescindible llevar uno.

- Calcetines de reserva. He de decir que siempre los llevo y nunca los uso pero nunca se sabe si se va a romper el calcetín o nos va a molestar alguna arruga, etc. por lo que siempre uso unos calcetines que sepa que me van a ir bien y otros de reserva en los que también confíe.

- MP3. Para mí la música es fundamental, te puede salvar una carrera si, en un momento de bajón, te pones la música que te hace tirar para arriba, aquella que te saca la adrenalina y te pone la vida a flor de piel. Suelo llevar música variada, en función del momento, más calmada al principio de carrera y mas cañera al final.

- Teléfono móvil. En la mayoría de los ultras la organización exige un teléfono móvil con carga y saldo con el número de la organización memorizado. Además, esto te puede salvar literalmente la carrera como me sucedió a mí el año pasado. Era el km 65 y estaba agotado, una llamada de Irene hizo que me viniese arriba, adelantar a varios corredores y al final lograr entrar en la posición 29.





Por último y más importante, el sentido común y el entrenamiento. Creo que este año se corre un riesgo, y puede ser el que gente con poca experiencia y un entrenamiento insuficiente pueda intentar llegar a meta a cualquier precio. Creo que debemos respetar la distancia, ir poco a poco.

Debemos pensar que hasta hace no mucho tiempo, hacer maratones ya era (y sigue siendo) toda una proeza, esta carrera es casi el doble y puede hacer mucho calor a pesar de ser el mes de Octubre.

Disfrutar del recorrido, tener la certeza de lo hacemos porque nos gusta y no para ser mejor que nadie ni para reconocimiento social, y escuchar a nuestro cuerpo serian mis consejos para esta carrera llamada a ser un clásica del panorama ultra para los próximos años.





Ni que decir tiene que una buena opción puede ser hacerla en equipo, con amigos siempre es más fácil, se reparten la carga psicológica y une mucho más. 
Los ultras y la vida no se diferencian mucho...



lunes, 19 de septiembre de 2016

VUELTA AL TAJO O...¿LLEGAREMOS A LA II ULTRA RACE CANAL DE CASTILLA?



Tras casi tres semanas parado... toca ver las posibilidades reales de llegar a la II Ultra Race Canal de Castilla. Recordemos que se trata de 80 km totalmente llanos, por lo que, al no ser un medio tan hostil como podría ser una carrera que discurre por montaña, hace que sea más fácil llegar.


Realmente estaba fuerte y han sido pocos días parado pero desconozco si voy a llegar con garantías de hacer una buena carrera.



Creo que el trabajo de volumen esta hecho al 99% pero tras días parado parece que ahora mis piernas aúllan cuando las exijo un poquito de esfuerzo. Mi cuerpo parece aletargado ante el mínimo requerimiento de esfuerzo. Supongo que será cosa de paciencia y de darle tiempo, razón por la cual creo, que no sabré si estaré en la línea de salida hasta el día antes de la carrera.

La carrera tiene lugar el día 8 de Octubre, son tres semanas de las que la última apenas entrenaremos para llegar frescos y estos primeros días  habrá que ir con calma. Es decir, contaremos con 4-5 entrenamientos de calidad para saber si estamos al 100% y llegamos en condiciones óptimas.

Sí las condiciones no son las adecuadas no arriesgaremos, dejaremos las balas para otro reto, no somos profesionales y, aunque nos apasione lo que hacemos, hay que saber decir NO a tiempo. Además, no queremos que los miembros de Ultra Trail Tordesillas nos tengan que arrastrar hasta meta, con la rémora que eso supondría para ellos.



 Intento tener esperanzas y ser positivo, pensar que llego pero es posible que tenga que pensar en no forzar. No sé si es miedo a romperme de nuevo, o las molestias son reales. Creo que esperaré hasta el domingo para intentar ver donde estoy realmente y ver como responde el sóleo.

Por un lado me da rabia porque la prueba la había preparado con mimo y esmero, la había cocinado a fuego lento sobre una buena base de musculación general y fortalecimiento del core. Había tocado ritmos que hacía mucho tiempo que no tocaba y estaba muy fuerte.

Quizá el dolor más difícil de soportar es ver que no llegas, que no recuperas, aunque si bien es cierto que todavía no pasaron 20 días y posiblemente nos estemos precipitando. Seguiremos peleando hasta el final para estar en la línea de salida antes de pensar que quizá tengamos que pensar en otro reto... Somos conquistadores de lo inútil...

jueves, 15 de septiembre de 2016

SOBRE LETRAS, SENDEROS Y MONTAÑAS...



Como no todo es correr, otra forma de alimentar el alma es leer. Es la forma que tenemos también de aprender de los demás, y si tengo que recomendar lecturas, estas son mis preferidas en lo que a superación personal, montañas y/o correr se refiere.


Mural a Cervantes por Carlos Adeva.



Aquí también la cosa va en gustos. Por una parte me gusta adquirir libros relacionados con entrenamientos, estos libros los empleo como apoyo para planificar retos y la temporada que girará entorno a ellos, siempre los tengo llenos de marcapáginas o post-it, los leo y los releo cuando me surgen algunas dudas o preguntas.

Pero por otra parte, siempre tengo un libro abierto para disfrutar de su lectura y además de leer libros de novelas, me gustan los libros de aquellas personas que han tenido una vida apasionante, cuentan una historia interesante o dejan un poso en el alma que me hace reflexionar.  Mis libros preferidos hasta ahora, de todos los que han caído en mis manos son estos que muestro a continuación.





1. Nacidos para correr.  Sin duda el libro que ha cambiado mi forma de pensar respecto muchas cosas, sobre todo las relacionadas con el tema de correr. Es un libro entretenido que novela hechos verídicos, artículos para revistas y estudios universitarios. Pero principalmente narra la historia de los tarahumara y de su protagonista, un estadounidense que se integra en la tribu como uno más para vivir como ellos, Micah True (Caballo blanco).

Personalmente me reveló la razón por la que no puedo dejar de correr al amparo de la madre natura, la sensación más primitiva y real que podemos experimentar en la actualidad. Podría decir que es el libro que más me ha influido y el que guardo con mayor cariño.





2.Correr, comer, vivir. Si los corredores de larga distancia de la élite tienen rasgos poco comunes con la sociedad, Scott Jurek se lleva la palma. Es un tipo de vida sencilla con una sensibilidad especial.

Es uno de los corredores que aparece en Nacidos para correr, uno de los artífices del diseño de las clásicas Brooks Cascadia, y sin duda uno de los mejores corredores de ultradistancia de todos los tiempos con un palmarés con pocas posibilidades de igualarse.

El libro narra la vida del corredor estadounidense, describe su filosofía de vida y además nos da varias recetas de fácil elaboración. Merece la pena dedicarle tiempo.






3.Bajo los cielos de Asia. Si tuviéramos que comparar a Scott Jurek con un escalador, el elegido seria sin duda Iñaki Ochoa de Olza, tristemente desaparecido en el Annapurna.

En este libro, Iñaki desgrana su vida en las montañas, que forjan su carácter practico y sencillo. Explica de forma directa cómo son las expediciones a las grandes cimas del Himalaya, como es su filosofía de vida por y para las montañas, guiado por los conceptos de amistad, compañerismo, gratitud y trabajo en equipo en el más estricto sentido de la palabra. Es, a mi juicio una oda a la amistad y la libertad, lejos de artificios, donde la palabra dada es un contrato y la amistad y la lealtad prima por encima de todo.




4. Corriendo hacia lo imposible. De lo último que he leído y, aunque me esperaba otra cosa, el libro me ha gustado.  El libro tiene tres partes diferenciadas, y he de decir que todas me parecieron interesantes. En la primera parte expone su estilo de vida y el sacrificio que supone para un marido/ padre/ trabajador dedicarse a correr carreras de larga distancia y como lo compagina. Después viene una crónica de su particular UTMB, y por último explica la historia de las carreras más emblemáticas de todo el mundo. Me gustó bastante.






5. La preparación en el corredor de montaña. A diferencia de los demás, este libro es más bien un apoyo que empleo junto con otros libros en la preparación de la temporada, ya que ofrece una preparación de conjunto. Octavio Pérez es un entrenador de referencia, su libro permite la preparación de todo el trabajo complementario a correr (musculación, fortalecimiento de core, etc).

También ofrece una serie de ejemplos de planes que si bien yo no sigo, si que me permite elaborar, dentro de unos cauces, una planificación de la pretemporada y temporada para que no reine el caos.






6. Entrenamiento para ultra trail. De todos los libros relacionados con entrenamiento de trail o ultra trail quizá este es el que más me haya gustado.
Su lenguaje sencillo, sus pautas y consejos hacen que no sea el típico libro que contiene un montón de datos técnicos que terminan aburriéndonos por no entender muchas cosas. Está orientado a deportistas aficionados que es lo que somos por muy en serio que nos tomemos nuestra pasión.
También destaca una parte sobre como afrontar psicologicamente una prueba de larga distancia. Muy muy recomendable.










miércoles, 7 de septiembre de 2016

RECOVERY TIME ...


Toca parar... toca descansar... toca dejar de salir y sentir esa sensación tan placentera del viento en la cara... toca usar esa palabra que tan poco nos gusta... reposo. Nos hemos roto justo en el mejor momento, cuando más rápido estaba, más fino, más fuerte, más progresaba en los entrenamientos... es eso lo que más duele.

La semana pasada, en la última salida, arrastraba unas molestias que pensé que eran pasajeras, resultado de no haber estirado bien o de una pequeña sobrecarga.

El caso es que en el km 7 cuando íbamos a buen ritmo, el sóleo no iba bien y se empezó a cargar mucho, a doler... y aunque al principio me permitía correr, me obligó a parar y estirar, sin saber que me estaba haciendo quizá mucho más daño todavía. Aún así me permitió volver a rodar a un ritmo mucho mayor, estaba teniendo tan buenas sensaciones... ir rápido y con el pulso tan bajo... hasta que llegó un momento en que al llegar al coche no me permitía ni pisar el embrague sin sentir un dolor enorme.

En principio pensé que seria una contractura seria, pues los síntomas era muy muy parecidos e incluso yo me notaba un pequeño rubor en la zona o como mucho una microrrotura, porque notaba en la zona algo de calor.





Tras acudir al fisioterapeuta me comenta desde el principio que no se trata de ninguna de las dos lesiones anteriores, lo que esta roto es la fascia del sóleo. Es decir, la fascia es una membrana que rodea el sóleo y lo encapsula por decirlo así (igual con el resto de músculos), y que termina conformando los ligamentos para su inserción en los huesos (la tibia y el peroné en este caso).

Lo primero que debemos hacer es reposo y empezaremos a tratarlo poco a poco, notaremos mejoría desde los primeros días, ya que durante los dos o tres primeros días el dolor es más o menos acusado y no permite apenas el movimiento (bajar escaleras es bastante molesto por ejemplo). Aún así, sigue habiendo dolor al contacto aunque menos.

La lesión en sí no debería presentar demasiadas complicaciones para recuperar bien, lo que más me preocupa es que no hace 6 meses desde la anterior rotura de fibras en el gemelo de la otra pierna. Por ello hay que buscar el origen y poner el remedio para no rompernos cada 6 meses pues las dos veces me ha pillado en el mejor momento de forma.

Todo ello a pesar de poner una buena base con trabajo de gimnasio, con trabajo de pesas en tren inferior y superior, trabajo intensivo de abdominales y lumbares, estiramientos, buena alimentación con productos frescos y lo más naturales posibles. Mi mayor preocupación es que tras haber hecho todo lo posible, nos hemos vuelto a romper y no sé cual puede ser la causa.

Las próximas semanas serán para leer en lugar de correr y entrenar...




Así, en este estado, es tiempo de dedicarse a otras cosas que no sean entrenar, estamos en... RECOVERY TIME.



lunes, 22 de agosto de 2016

4 COSAS QUE APRENDÍ DE LA ULTRADISTANCIA



Ponerse en la línea de salida de cualquier carrera de ultradistancia supone un reto para cualquiera de nosotros y tomar parte de una carrera de este tipo tras completar el entrenamiento necesario es ya de por si una victoria (quizá mucho más complicado que terminarla). Este tipo de carreras es como un viaje, una gran experiencia en la que pasan muchas cosas que no ocurren en las carreras más cortas. Es por ello que este tipo de pruebas me han enseñado varias cosas que aplico a mi día a día en cualquier aspecto de mi vida cotidiana y que creo, sirven para todo el mundo:




1. Moverse con la carga mínima: Yo desde el principio me incliné por usar una mochila de 5 litros de capacidad en lugar de una de 10 litros diseñada para ultradistancia: a menor capacidad, menor espacio para cosas superfluas, menor peso.  Al igual que en la vida, lo ideal es moverse con lo mínimo indispensable, lejos de artificios y adornos que nos hacen perder tiempo y energía. Ir a la esencia de las cosas es para mí la mejor opción.





2. Relativizar las cosas (buenas y malas): Alguien dijo una vez que en las carreras de larga distancia se muere varias veces y se resucita otras tantas. Hay veces, en las que tu rendimiento cae en picado de repente, sin razones aparentes (aunque las hay y no son tan aparentes), en las que te duele hasta las pestañas hasta que, algo ocurre, algo cambia,  aumentan tus prestaciones sin darte apenas cuenta, ya no te duele nada y estás volando.
Por tanto, aprendes que todo pasa, que todo es relativo. Si estás mal se pasará, si estás bien, aprovecha, que también pasará.  Siempre se puede dar un poco más, si somos capaces de comprender que las malas rachas existen pero que éstas terminan. Todos los túneles tienen un principio y un final.





3. Para llegar lejos rodéate de buena compañia: Los masai dicen: "Si quieres ir rápido ve solo, si quieres llegar lejos ve acompañado".
Como todo en la vida, rodearse de buena gente con quien hacer equipo, gente que tire de tí en los momentos malos y de quien tirar en los buenos, con quien repartir la carga psicológica es fundamental a la hora de afrontar cualquier reto o situación.  Entrenar en grupo o trabajar en equipo da satisfacciones que no aporta el trabajo en solitario. Somos animales de manada.





4. Hacer las cosas con el corazón: Para afrontar una carrera (u otro reto o proyecto) en la que sabes que vas a invertir una cantidad de tiempo considerable, tanto en preparación como en llevarla a cabo,  debes preguntarte a tí mismo si realmente es algo que quieres hacer. Sí te sale ardiendo de lo más profundo de tu ser, sí te crea la suficiente ilusión como para levantarte con brillo en los ojos cada día a pesar de las dificultades, ese es tu reto, ese es tu proyecto, y es que como dijo El Principito: "sólo con el corazón se ve bien, lo esencial es invisible a los ojos".




miércoles, 6 de julio de 2016

LA BATALLONA DE SOMIEDO 2016 ... O LA ETERNA LUCHA CONTRA EL CALOR



La Batallona 2016 será recordada por su asfixiante calor, mucho calor y mucha humedad para la altitud y medio en el que se desarrolla esta prueba sin igual. Hablamos de 26 grados a las 10:45 a algo más de 1700 metros sobre el nivel del mar.



Nada más bajarnos del autobús, nos colocamos en el arco de salida. Allí guardaremos un minuto de silencio por Eulogio Bello, primer ganador de la primera edición de la Biosfera Trail, donde empecé a amar este deporte.

Tras el minuto de silencio, atruenan los himnos de ambos equipos, gaitas en ristre y mano en el pecho. Los pelos ya están como escarpias viendo como se las gastan los Astures, los de la tierrina son muy buenos en esto.

Sin más preámbulo, arrancamos a correr en una bajada que nos hace ir rápido y que nos da confianza. (A mi demasiado, a la vista de lo entrenado o nada entrenado que vengo) pero el paraje es espectacular y aquí se viene a disfrutar.




En apenas 7 minutos hemos recorrido 1800 metros y llegamos al primer lago y la primera rampa. Con las pulsaciones a tope, me he propuesto bajarlas según subo sostenido y relajando la respiración. Nada de esto ocurre y estoy ya en 180 pulsaciones y subirán todavía algo más, a pesar de los esfuerzos por recuperar la calma.





Cuando veo que el pulso baja un poco, vuelvo a trotar, pero es imposible no estar en 185 ppm, a este ritmo no llego ni al siguiente kilómetro, así que decido caminar y relajarme. En los próximos minutos me dedicaré a intentar bajar el pulso... sin conseguirlo apenas.

Me veo que no termino de arrancar, que el cuerpo no quiere y que las piernas no tienen fuerzas, no sujetan en las bajadas y no me aúpan en las subidas, por lo que tengo que decidir algo rápidamente.

La decisión que tomo es sencilla: decido relativizar los problemas y de momento no lucharé contra el crono, aguantaremos la tormenta y una vez pasada, aprovecharemos los buenos momentos que pueda tener para apretar, sobre todo al final, así tendré opciones de adelantar a algún corredor que no haya dejado para el final.

Así, combinando trote y caminata, llego al primer avituallamiento en medio de la verde pradera astur, bebo un poco de agua y el resto lo echo a la riñonera que me traje con gran acierto. Como veo que no termino de arrancar y el calor me hace mucha mella, decido tomar un gel que traje por la misma razón. No servirá de nada...

Voy fundido literalmente y no puedo pensar que me quedan 18 km porque no llego, así que pienso que me quedan 4 km para el siguiente y que voy a intentar llegar. También me empiezo a plantear seriamente abandonar, por lo que cada poco tiempo me voy chequeando mentalmente para asegurarme no correr riesgos innecesarios. Lo peor, el pulso, no baja de 170 ppm y me animo pensando que estoy dando el máximo.

El siguiente tramo, para mi tranquilidad es más técnico, y aunque hay que tener un pelin de cuidado, me permitirá bajar el pulso pues con seguridad encontraré tapón,

Mis sospechas se confirman, pues aunque salí de los primeros y pude adelantar gente en los 2 km iniciales, después me adelantó un montón de gente en cuanto paraba a caminar para rebajar pulsaciones.  Aprovecho este tramo para beber todo lo que puedo, pues en apenas 1-2 km hay avituallamiento y llenare el botellin.




Tras parar en el km 9, continuo a sabiendas de que los próximos km los pasaré mejor, que habrá sombra y que al menos el sol no sufriré tanto. El camino se pone divertido ahora, convertido en una senda que desemboca en una pista llena de piedra suelta que pica hacia abajo y permite ir algo más tranquilo.

Voy algo más relajado, camino de Valle de lago, mirando el pulso esta vez a niveles mas normales cuando de repente me pego un resbalón me doy de bruces contra el suelo, no será la única vez.

Me doy cuenta de que las piernas no tienen las fuerzas suficientes, no ya para apretar, sino para sujetarme, razón por la cual no puedo bajar con comodidad cuando la pendiente es más acusada. Culpa de ello serán dos torceduras serias en ambos tobillos, una de ellas dolorosa de primeras en la que pensé que me había hecho mucho daño.

He de decir que, a pesar de que nadie nos jugamos nada, muchos corredores pasaron y pocos fueron los que se interesaron, y creo que en un ambiente hostil como puede ser la montaña esta actitud nos puede jugar malas pasadas.


Al llegar a Valle de Lago, repostamos rápido, me veo con algo de gasolina, aunque no mucha y decido ir tirando poco a poco, guardar las balas para los 3 últimos km en los que un par de repechos pueden hacer mella a quien haya quemado las naves antes de tiempo.

Empiezo a adelantar gente poco a poco, veo que voy a terminar bien aunque la marca no sea la mejor, y así con el animo arriba voy avanzando.





Poco a poco, vamos llegando a Pola de Somiedo, entre caminos y pistas sombríos pero jalonados por ratos de sol.  Llego al km 20,paro un minuto, bebo agua y guardo el sobrante, todavía me hará falta agua y no quiero sustos.

Me adentro en un camino que pica hacia abajo bastante, que tiene barro y que normalmente resbala, con cuidado llego abajo, al llano, y ahora este tramo me lo sé de memoria. Delante mio viene un hombre que podría ser mi padre, con buena velocidad de crucero y con algo de fuerzas para el final según aparenta, trato de pegarme a él para adelantar de golpe a media docena de astures fundidos literalmente por el calor.

Me veo mentalmente fuerte pero físicamente muy mermado, el hombre se para en el repecho, no contaba con ello pero paro con el. Al volver la cabeza viene otro señor por detrás corriendo con ánimo también de pararse... yo he oido gente delante que no veo y quiero más... Arranco de nuevo...

Efectivamente, al girar cojo la carretera que baja de Valle de Lago a Pola de Somiedo  me dice un Agente Medioambiental que me quedan 1500m... tiene razón y... veo gente, mucha gente, son por lo menos 8...





Los adelanto a todos y antes de enfilar la primera curva de Pola, he adelantado al noveno en la recta, corro como no he corrido nunca, pensando que pude haberlo dejado al principio y decidí seguir, miro el reloj y veo el pulso literalmente desbocado... veo otros cuatro corredores antes de entrar en meta bajo el sonido de las gaitas y el gentío llego al puente, busco a Irene y no la veo, giro a la derecha, aprieto aún más para cruzar la meta de una carrera que es algo más que una carrera, que me cura el alma y me conecta con mi yo profundo. Esto es lo que quiero hacer.




Pd: creo que esta carrera tan especial les debe una a los Montaraces del Norte, creo que hicieron mucho en las dos primeras ediciones para que la popularidad de esta singular fiesta del deporte tenga la repercusión actual, entre ellos destacan dos: Eduardo Flecha Perez y Pablo Real Fernandez, serian, con todos mis respetos los mejores capitanes que León pudiera tener.